Llega la hora de planificar las vacaciones en familia y toca tomar muchas decisiones… ¿mar o montaña? ¿destino extranjero o nacional? ¿hotel o apartamento? Hoy vamos a destaparos las ventajas y desventajas de las dos opciones para ayudaros a escoger la mejor opción para vosotros.
- Hoteles
Como siempre, generalizar tiene sus peligros, pero normalmente cuando vamos a un hotel, sobre todo si viajamos con niños, vamos a que nos lo den todo hecho. En el hotel te aseguras el servicio de limpieza de la habitación y por tanto un cierto orden y no tener que hacer la compra de la semana como si estuvieras todavía en casa. Asegurarte un buen desayuno, e igual cena, para no tener que arrastrar a toda la familia nada más despertarse por los bares de la zona es una de los motivos que nos pueden hacer decantarnos por el hotel.
Lo mismo ocurre con las animaciones infantiles, especialmente si nos decantamos por un destino vacacional. Disponer de actividades para niños o incluso de un club infantil donde poder dejar a los niños un poco entretenidos mientras nosotros echamos la siesta, también es un gran punto a favor. Además, allí conocerán otros niños de su edad y no tendrán tanta sensación de ir siguiéndoos a todas partes.
Por contra, viajar a un hotel con niños pequeños que todavía no pueden dormir en una habitación contigua a la vuestra, tiene el enorme problema de los horarios y la falta de intimidad. Llega la hora de que ellos se acuesten pero vosotros todavía no tenéis sueño y ver la tele a oscuras y casi en silencio para no despertarlos es una solución muy pesada pero inevitable en los hoteles.
- Apartamentos
Sin duda, la gran ventaja de los apartamentos en unas vacaciones en familia es la libertad de movimiento. No tener que respetar los horarios de desayunos, comidas o cenas es un punto muy apreciado cuando se quiere desconectar de la marcada rutina diaria. Además, podréis acostar a los niños mientras vosotros os tomáis una copa en la terraza o veis una película en el salón.
Poder cocinar, a nuestro gusto -especialmente cuando existe alguna intolerancia alimenticia- es también importante cuando se va de vacaciones con niños pequeños y no quieres que pasen todas las vacaciones comiendo nuggets con patatas de los menús infantiles de los restaurantes.
La desventaja de un apartamento turístico convencional es no disponer de una recepción a la que pedir ayuda en caso de problemas, ni de los servicios de animación para los niños.
- Apartotel
Como en casi todo, una buena opción a la hora de decidiros es buscar la «tercera vía«. Hoy en día existen buenos apartoteles o resorts turísticos que ofrecen apartamentos muy bien equipados, y también disponen de los mejores servicios hoteleros, combinando así lo mejor de los dos mundos y asegurándote las vacaciones en familia perfectas.